El precio del maíz en baja es una buena noticia para los tambos

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Al seguir estancado el consumo interno de leche en valores de 180 litros/habitante/año y no repuntar la exportación, parece lógico que no se vuelque más leche en el mercado. “Los planteos más pastoriles y de menores costos se defienden bien en estas coyunturas, pero la falta de lluvias los complicó en su productividad y sus costos”. Así lo considera la consultora  Zorraquin + Meneses & Asoc en su último informe.

Los planteos de alta suplementación y encierre han mantenido producciones altas en general, con costos de alimentación que les permitieron ser rentables en esta etapa. “Al mantenerse el maíz en precios estables o bajistas, seguramente sea una de las pocas buenas noticias esperables para este negocio en el próximo tiempo”.

En el primer bimestre del año el precio de la leche se ubicó en promedio en los 17,8 $/litro, esto implica cierto deterioro respecto a la inflación de costos del tambo. “Durante 2019 la producción total de leche se redujo en nuestro país y aunque en enero se observó un leve repunte respecto a enero de 2019, es de esperar que no se registren grandes modificaciones en la oferta de este año”.

Con respecto al negocio ganadero, el informe detalla que el principal destino de las exportaciones de carne Argentina es China, representando más del 60%. Lejos, con valores inferiores al 10% cada uno, le siguen países como Chile, Israel y Alemania.

“Esta China-dependencia ha dinamizado el negocio exportador pero cuando ocurren eventos negativos toda la cadena tiembla”. Es razonable pensar que este mercado seguirá activo cuando pase la crisis, pero nadie sabe el tiempo que llevará. Esto le pone un techo al aumento de precios, ya que el mercado interno (que representa hoy cerca del 70%) no podrá absorber sin quitas los excedentes.

Los precios al productor siguen similares al mes pasado, con el gordo en el orden de los 90 a 100 $/kilo, la vaca gorda entre los 70 y los 75 $/kg y el ternero entre los 100 y los 110 $/kg según peso y calidad. “El vientre preñado sigue teniendo un mercado de demanda restringido, reflejándose en un precio que no sube y se mantiene en el orden de los $35.000 a $45.000 hace muchos meses”.

Finalmente la consultora destaca que por suerte no hubo modificaciones en las retenciones a la carne, evitando otra distorsión en el mercado. “La falta de producción de forraje en las zonas secas ha hecho aumentar la suplementación y en los planteos de cría de esas regiones se adelantan los tactos y los destetes”. Aún hay pocos datos de resultados de preñez, pero los primeros valores que vimos son razonables.

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