La plata que queda después de pagar los costos de producción se divide en 3: el valor de quienes alquilan la tierra para producir (26,6%), la ganancia (9,8%) y los impuestos que se pagan (63,6%). Este es el último que medió el Índice FADA, cuánto es el peso de los impuestos para quienes trabajan la tierra”, el Índice subió comparado a la medición del marzo pasado.
“Aún con el efecto de la baja temporal de Derechos de Exportación (DEX), la caída en los precios fue tal que genera un menor valor de la producción de los granos y, con ello, un mayor peso de los impuestos”. ¿Qué está pasando con el trigo? “En el marco de la campaña de trigo y dado que es el único cultivo de los que analizamos al cual se le prorrogó la baja temporal de DEX, resulta interesante hacer un repaso de su situación”.
Para la Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina los precios de junio 2025 se encuentran muy por debajo del promedio de los últimos cinco años.
Comparado con el promedio desde marzo 2020 a la actualidad, hoy el trigo está 20% por debajo. Al analizarlo en relación a un año atrás, la caída es del 28,2% del precio. “Si los precios son menores, la renta del productor es menor, porque recibe menos dinero por los granos que vende, pero sigue pagando los mismos impuestos.
El panorama para esta campaña de trigo no es alentador. Con caída de precio y suba de algunos insumos, el índice trepa al 78%. “Se necesitaría un precio local más cercano a los USD 220 por tonelada para mejorar el resultado, pero hoy promedia USD 200 por tonelada”. El peso de los impuestos en soja es del 65,9%, maíz 53,4%, trigo 78,2% y girasol 63,2%. De todos los impuestos que paga una hectárea agrícola, el 63,8% son nacionales no coparticipables, es decir, que no vuelven a las provincias. El 28,4% son nacionales coparticipables, 6,8% corresponde a los impuestos que cobran las provincias y un 1% son los municipales.
Mientras el Índice FADA nacional es de 63,6%, las provincias muestran diferencias según costos, producción e impuestos locales. Córdoba registra un 64%, Buenos Aires 59,7%, Santa Fe 58,6%, La Pampa 62%, Entre Ríos 69,1% y San Luis: 61,1. A modo de resumen: en todas las provincias analizadas se paga impuesto un inmobiliario rural e impuesto a los sellos para la compraventa de granos.
En Buenos Aires, Entre Ríos, La Pampa y San Luis se pagan Ingresos Brutos con diferentes porcentajes. En Córdoba y Santa Fe la actividad está exenta. Buenos Aires y Santa Fe tienen tasas municipales, mientras que La Pampa tiene las guías cerealeras. Córdoba, San Luis y Entre Ríos no tienen imposiciones a nivel local. San Luis y La Pampa tienen impuestos al estilo de aduanas internas. “Cada una de estas provincias enfrenta realidades distintas en cuanto a sus rindes, estructura de costos e impuestos, lo que explica la variabilidad de estos resultados”.