Aunque el impacto de las medidas no está analizado en la cosecha gruesa, muchos sugieren comprar silosbolsas suficientes. El que cosecha deberá hacerse la idea que tendrá que guardar todo porque seguramente las cosechadoras, tractores y tolvas se movilizarán pero no se sabe mucho del resto de las etapas después de la trilla. En estas actividades el personal no trabaja en grupo además lo hace a campo abierto y se tomarán medidas de distancias e higiene en el lugar de trabajo.
Pese a que la cosecha recién está arrancando, puede existir falta de camiones por lo que se recomienda no solo disponibilidad de silosbolsas sino también un volumen de gasoil adecuado por si surge falta de combustibles durante la aplicación de las medidas de prevención del coronavirus. Pero el trabajo a campo sería el menos perjudicado comparándolo con la industria.
La producción porcina y aviar están acostumbrados a los protocolos de bioseguridad de manera tal que no será difícil implementar las medidas que se aplican en todo el país.
El protocolo de bioseguridad en los establecientos de producción puede variar en algunos casos como por ejemplo sugieren que en una granja donde paran a comer los trabajadores deberán hacerlo en dos turnos y para el transporte de personas aplicar 2 horas de entrada y salida del personal.
Todos los días con un termómetro se deberían tomar la temperatura de las personas que trabajan en el lugar. Lo que hoy ya se aplica es que cuando ingresas a una granja hay que bañarse, cuando salís hay que bañarse nuevamente y así sucesivamente.
El principal cuello de botella puede aparecer en los frigoríficos, si deciden parar sus actividades, la producción de animales se verá afectada. Hay frigoríficos avícolas que estarían evaluando parar 15 días, en ese caso las aves se amontonarían en los galpones y los exponen sanitariamente a los pollos y a los consumidores. Algo similar sucedería con los frigoríficos porcinos, se sumarían muchos cerdos en la salida de producción generando dificultades en los galpones de producción.