Ni cultivos, ni pasto, ni agua así le pegó la sequía al sur de Entre Ríos

Compartir:

La Federación de Asociaciones Rurales de Entre Ríos (FARER) solicitó  al gobierno provincial la declaración de Emergencia Agropecuaria para los departamentos Gualeguay, Gualeguaychú, Islas del Ibicuy y Concepción del Uruguay.

Entre las situaciones más comunes que atraviesan a cientos y cientos de productores en el sur provincial puede contarse a modo de resumen, el siguiente panorama:

Campos semi bajos y bajos, de pastos naturales: están sufriendo la escasez de agua desde mayo de 2020, sin pasto y no pudiendo engordar la hacienda. Estos campos necesitan lluvias de más de 100 mm para empezar a recuperarse, su situación es muy crítica. Ni siquiera cuenta con los cursos de agua natural para el consumo de los animales.

Campos ganaderos con pasturas: las pasturas que se comen no rebrotan por la falta de agua, se están complicando las rotaciones, con altísimos costos de alimento extra para paliar la situación o teniendo que mal vender para achicar la cantidad de hacienda, en ambos casos se complica la situación económica del productor y por ende la reposición de hacienda.

Maíz temprano: los maíces que se están cosechando rondan entre 3 y 3,5 ton/ha. En la mayoría de los casos de campos arrendados estos valores están por debajo de los costos totales, teniendo en cuenta costos de implantación, de cosecha y arrendamiento.

Maíz tardío: las plantas se están secando, severo stress hídrico, con clorosis muy marcada y en gran cantidad de situaciones ya hay necrosis (muerte). Se afectó mucho la floración, por ende, la formación de granos y la merma de rinde serán muy importante.

Soja de 1º: la situación es regular a mala, sin pronósticos de lluvias por delante esto se agravará aún más, las plantas están abortando chauchas y en muchos casos muriendo; los rindes están cayendo al costo de implantación.

Soja de 2º: es la peor situación, más del 70% de estas sojas están pérdidas.

Sorgo: muy sufridos, con estimaciones que rondan los 2,5 tn/ha., panojas que no terminaron de emerger y lo poco que hay para cosechar tendrá un gran problema de cosecha en sí mismo.

Desde la entidad gremial señalaron que “no sólo ha sido muy escasa la cantidad de milímetros caídos, sino que ello se asoció a las temperaturas muy altas que han dañado visiblemente los cultivos, pasturas y campos naturales, siendo irreversible los perjuicios ocasionados con la implicancia que ello tiene en la economía de los productores”.

Anterior

La trilla del arroz en Santa Fe comenzó con buenos rindes

Siguiente

El clima le pasó otra guadaña a la producción de soja y maíz

Noticias Relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *