Durante la campaña 2024/25 se sembraron 18,4 millones de hectáreas de soja, lo que representa un incremento del 6,4% respecto a la campaña 2023/24 y un 10% más en comparación con el promedio de las últimas 5 campañas (superficie promedio de 16,8 millones por hectárea).
En la ventana de siembra, la humedad superficial presente en gran parte del área agrícola permitió avanzar con los planes de siembra de soja de primera, y con algunas dificultades en soja de segunda.
Las altas temperaturas y la falta de humedad registradas a comienzos de enero, dificultó su implantación. Al mismo tiempo, la soja de primera ingresaba en su periodo de definición de rindes bajo un ambiente de elevadas temperaturas y escasas precipitaciones.
A fines de febrero se restablecieron las condiciones hídricas en gran parte del área agrícola, lo que permitió obtener rendimientos superiores a los inicialmente esperados. El rinde promedio nacional fue de 29,7 quintales por hectárea, un aumento del 15% en comparación promedio de las últimas 5 campañas. Así lo destacó un informe de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires.
La producción total nacional se ubica en 50,3 millones de toneladas, 100.000 toneladas superior a la previa campaña. Se espera una contribución de la cadena a la economía argentina de USD 15.373 millones de producto bruto sojero. Esto representa una baja del 12% en comparación con el valor del ciclo pasado por los menores precios de porotos y harinas.
Adicionalmente, generaría exportaciones por USD 19.173 millones (-5.1% i.c.) y USD 6.856 millones por recaudación fiscal devengada por la campaña (-13,4% i.c.).