La Bolsa de Cereales de Córdoba indicó que el margen bruto promedio provincial para trigo en campo propio sería de 84 dólares por hectárea en la campaña 2018/2019, con una caída del 4% respecto a la campaña anterior. Si bien el precio a cosecha crecería USD 29 por tonelada, el mismo sería contrarrestado por una caída en el rendimiento como consecuencia de precipitaciones por debajo de la media que afectaron al cultivo durante su período crítico. De no existir los derechos de exportación que se aplican al cereal desde comienzos de septiembre de 2018, el margen bruto hubiera sido de USD 134 por hectárea, es decir, USD 50 por hectárea más elevado que el estimado.
De manera incipiente, han comenzado las tareas de cosecha de trigo 2018/19 en la provincia de Córdoba con distintos resultados en términos productivos de acuerdo con la zona relevada, aunque se observa una característica en común: la merma de rendimientos por la sequía que afectó al cultivo durante su período crítico.
Según datos provisorios del Departamento de Información Agroeconómica, el rendimiento promedio ponderado del trigo en Córdoba para la campaña 2018/19 sería de 25 quintales por hectárea, 8,5 quintales por debajo del ciclo anterior. Respecto al promedio histórico, la producción media por hectárea sería un quintal inferior, representando el valor más bajo de los últimos cinco ciclos.
Junto a las condiciones agrometeorológicas, una de las variables más importantes para definir la siembra de un cultivo es el precio que se espera al momento de cosecha. En el caso del trigo, al momento de la siembra los precios futuros para la posición Enero 2019 (contrato de referencia para la cosecha del cereal) rondaba los USD 187 por tonelada, USD 28 por encima de lo registrado durante la campaña 2017/18.
Sin embargo, en el mes de agosto y con la totalidad del trigo sembrado, se implementó un derecho a la exportación de $ 4 por dólar para el cereal, lo cual implica una alícuota efectiva sobre el valor de exportación de entre el 10% y el 11%, afectando de manera directa el precio recibido por el productor. Sin embargo, más allá de los nuevos derechos de exportación, el precio promedio de la posición cosecha en Rosario es similar al esperado al comienzo del ciclo, es decir, USD 188 por tonelada, alcanzando el valor más elevado de las últimas cinco campañas. Esta situación obedece a una producción menor a la esperada y una fuerte demanda por el cereal tanto de la exportación como del sector industrial.
En relación con los costos de producción, los incrementos interanuales han sido dispares. En el caso de los insumos dolarizados como los fertilizantes se han registrados subas de entre el 16% y el 18%, mientras que los insumos que se comercializan en pesos como el gasoil, han registrado una baja del 3%. Sin embargo, la relación insumo-producto presentó una mejora importante en todos los rubros debido a que el precio del trigo registró un incremento del 38% (tomando como referencia el mes de siembra), con una cotización que pasó de USD 163 por tonelada en junio de 2017 a USD 225 por tonelada en igual período de este año.
Para la provincia de Córdoba, el margen bruto promedio de trigo en campo propio sería de USD 84 por hectárea, cayendo un 4% respecto a la campaña 2017/18 debido a que el incremento en el precio no pudo compensar la caída en el rendimiento del cultivo. El margen neto, que contempla los gatos de estructura, sería de USD 38 por hectárea, registrando una variación positiva de USD 10 por hectárea. Como puede observarse, los gastos de comercialización y de estructura han caído debido a que están compuestos por variables cuyos precios se determinan en el mercado interno y se encuentran influenciados por otros factores ajenos al mercado internacional, por lo que el incremento en el tipo de cambio ha hecho disminuir el valor en dólares de estos. En cambio, los costos directos de producción, con mayores componentes cuyos precios son determinados externamente, han subido en torno al 3%.
De no existir los derechos de exportación que se aplican al cereal desde comienzos de septiembre de 2018, el margen bruto sería de USD 134 por hectárea, es decir, USD 50 por hectárea más elevado que el efectivamente registrado. Ante una campaña afectada por una de las sequías más graves que atravesó el país, este nuevo impuesto genera una fuerte carga sobre la cadena agroindustrial, principalmente sobre productores que sembraron el cereal para atenuar la mala performance productiva de los cultivos estivales.
Margen bruto en campo propio por departamento Si bien a nivel provincial el margen bruto es positivo, a nivel departamento los resultados económicos presentan grandes diferencias en línea con los rendimientos obtenidos. En los departamentos Juárez Celman, Río Cuarto, Río Primero, Santa María, Totoral y Tulumba la producción de trigo tendría un resultado negativo debido a que los rendimientos se estiman por debajo de los 20 quintales por hectárea, un valor menor que los rendimientos de indiferencia.
En los departamentos del sudeste provincial se obtendrían los mejores resultados, con márgenes brutos de USD 180 por hectárea para Pte. R. Saénz Peña, USD 115 por hectárea para Marcos Juárez y USD 118 por hectárea para Unión. Contabilizando los gastos de estructura el margen neto sería negativo para la mitad de los departamentos, siendo Totoral el más afectado debido a que su rendimiento se estima en 11 quintales por hectárea.