Los costos del autotransporte de cargas volvieron a exhibir un notorio incremento en noviembre: transportar mercadería por carretera salió casi un 6% más caro, y cerca de un 58% más en los primeros once meses del año. Fuertes caídas en los volúmenes transportados, incertidumbre económica y cambiaria, alzas de las tasas de interés y recesión conforman el marco en el que se produce este preocupante aumento.
En los últimos doce meses, se registró un incremento anual acumulado de 62.41%. En estos términos, 2018 será el año de mayor variación de costos luego de 2002, teniendo en cuenta que ya se supera por amplio margen -casi veinte puntos- el resultado de 2014 (38.4%). El aumento de noviembre se da tras la suba en octubre del orden del 3% de los costos y tras el incremento récord de casi un 13% en septiembre.
El incremento del Índice FADEEAC en noviembre vuelve a explicarse a partir de variaciones en la mayor parte de los insumos componentes del sector, si bien sobresalen el nuevo ajuste del Combustible y Personal, con la entrada en vigencia de la segunda cuota del CCT 40/89 y el pago de la asignación no remunerativa (Decreto PEN 1043/18).
En primer término, el nuevo incremento del gas-oil este fin de semana en torno al 3%, a pesar de la caída de los precios internacionales del petróleo, vuelve a presionar sobre los costos del transporte de cargas. La magnitud del alza del combustible, que alcanza el 72% en el año, impacta cada vez más en la estructura del sector y lleva al límite la ecuación económico-financiera de las empresas. El precio trepó nada menos que 97 % desde la desregulación del mercado de hidrocarburos, el 1 de octubre de 2017.
Los aumentos nominales y relativos del combustible no sólo dañan el funcionamiento del sector en todo el territorio nacional sino que se transforma cada vez más en un problema para la economía real, ya que el rubro Combustible y Gas duplica la altísima inflación también que refleja el índice de precios mayoristas (IPIM).
En segundo lugar se ubica el aumento del costo laboral en el sector, surgido del segundo tramo del convenio rubricado en julio y reformulado en octubre. A esto se le suma el agregado de la asignación no remunerativa Decreto PEN 1043/18, a pagar en dos cuotas de $2500, en noviembre de 2018 y enero de 2019, con su impacto directo en Personal del 15.98% de aumento sobre los valores vigentes al 30 de octubre. También afecta a los indicadores relacionados: Reparaciones (2,41%) y Gastos Generales (6,10 %).
Por el lado de los costos del equipo, Material Rodante registró una baja de casi 3% (2.95 %), luego de las fuertes subas en el año, con impacto asimismo en Reparaciones. Finalmente, Neumáticos se incrementa ligeramente (0.28%). El resto de los rubros (Lubricantes, Seguros, Patentes y tasas, Peaje), excluyendo la variación en el Costo Financiero (5,62%), no sufrió modificaciones en relación con octubre de 2018.
Con el registro de noviembre el aumento de costos en el transcurso del año alcanza el 57.78%, con lo que supera en más de 30 puntos el incremento anual de todo el 2017 (23.92%). En el transcurso de 2018, lideran los aumentos de costos el Costo Financiero (168.1%), Material Rodante (95.4%), Lubricantes (90.4%), Reparaciones (76.6%), Neumáticos (75.5%), y Combustibles (72.1%), en tanto que en el incremento desagregado en 2017 lideraron los aumentos de costos Peaje (42.2%), en el marco de los fuertes ajustes en el tránsito de peajes desde y hacia la CABA, seguido por Gastos Generales (40%), Patentes (35%) y Costo Financiero (29.7%).
El sostenido aumento de los costos para transportar mercadería en el país que redobla la presión sobre el sector tiene el agravante de sumar el peso impositivo del orden del 40%. El mapa del autotransporte de cargas es cada vez más negro cuando se trata de proyectar a futuro.