La Bolsa de Cereales de Córdoba en su informe de mercados agrícolas indicó que el cultivo de soja en el hemisferio sur ha entrado en su fase final con la definición de los rendimientos y, con ello, la producción de dos de los mayores productores de soja del mundo por detrás de Estados Unidos. En Argentina, más allá de las diferencias entre las estimaciones de organismos públicos y privados, se observa una fuerte recuperación luego de la severa sequía que afectó al cultivo en la campaña 2017/18.

Mientras que la Bolsa de Comercio de Rosario espera una producción de 52 millones de toneladas, el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos estima 55 millones de toneladas. Si bien las condiciones climáticas continúan siendo favorables para la oleaginosa es importante tener en cuenta que excesos de precipitaciones en el próximo mes podrían generar pérdidas de calidad en el grano y complicaciones en las labores de cosecha y logísticas que impidan alcanzar el volumen de producción estimado.

En Brasil, con un avance de cosecha cercano al 50%, la Compañía Nacional de Abastecimiento recortó su estimación de producción en 5,8 millones de toneladas respecto a la campaña previa, aunque se ubica en el tercer mayor nivel de la historia. Esta caída obedece a un menor rendimiento promedio, que pasaría de 33,9 quintales por hectárea en 2017/18 a 31,7 quintrales por hectárea en el ciclo actual por falta de precipitaciones en los estados de Mato Grosso do Sul, Goiás y Paraná.

Respecto a las exportaciones, durante el mes de febrero alcanzaron un récord de 6,1 millones de toneladas, más del doble de lo exportado para igual mes del año anterior. En 2019, se espera que las exportaciones sean menores como consecuencia de la menor producción esperada, alcanzando los 70 millones de toneladas, 13,6 millones de toneladas más bajas que las de 2018.

 A nivel mundial, más allá de la menor cosecha esperada en Brasil, la producción mundial en la campaña 2018/19 se ubicaría en el mayor nivel de la historia y, por tercera campaña consecutiva, sobrepasaría al consumo, resultando en un aumento en los stocks finales de soja. De esta manera, la relación stocks/consumo sería récord, alcanzando casi el 31%.

Tal como se indicaba en el informe de mercados agrícolas del mes de febrero, no hay expectativa de aumentos importantes en el precio de la oleaginosa en el futuro, por lo menos durante esta campaña. Si bien puede haber movimientos alcistas que respondan a problemas climáticos en la cosecha sudamericana o en la siembra estadounidense, la oferta abundante de soja en el mundo le pone un límite a los En el mercado de Chicago, la posición neta vendida de los fondos especulativos aumentó, sin embargo, los volúmenes son relativamente bajos al igual que el interés abierto.

Las negociaciones entre China y Estados Unidos respecto a la aplicación de aranceles sobre la soja sumado al escenario de abundante oferta global no generan demasiado optimismo respecto a un incremento en el precio de la oleaginosa. Al igual que en el reporte previo, los fondos especulativos no estarían ejerciendo una influencia importante sobre los precios, lo cual se refleja en la cotización de Chicago, donde el precio de la oleaginosa se encuentra en un recorrido lateralizado.

A la fecha, se comercializaron 37,8 millones de toneladas de soja, superando levemente la producción de la campaña, por lo que a partir de ahora se comenzarán a consumir stocks por parte de los industriales y los exportadores. Al mismo tiempo y para suplir la carencia de soja local, las importaciones para la campaña 2017/18, a febrero de 2019, han sido de 5,4 millones de toneladas. Si bien el volumen de comercialización de soja fue menor al de la campaña previa, el total de la producción se comercializó con mayor rapidez, llegando a cubrir el 100% de la misma para mediados de febrero.