La siembra de maíz de segunda en el centro norte de la provincia llegó a las 35 mil hectáreas de las 88 mil hectáreas estimadas para la presente campaña. Las labores de siembra tienen un avance del 40% así el maíz tardío continuó sumando superficie, pero caería un 12% el área sembrada.
Esta disminución de superficie se debe a un conjunto de factores pero los dos de mayor importancia son: la situación de suelos saturados a sobresaturados consecuencias de los excesos hídricos y sucesivas precipitaciones desde la primera semana de diciembre hasta las registradas el 30 de diciembre.
La otra es económica ya que los márgenes de rentabilidad no cierran y en ello hay varios indicadores: insumos, fletes y retenciones hacen que en los departamentos del centro y norte se acentúa dicha disminución.
Las lluvias ocurridas viernes, sábado, domingo y lunes 30 de diciembre para el caso de centro norte las lluvias de la primera quincena con 200 a 300 mm y luego cada cuatro a cinco días 30 a 50 mm hizo que los perfiles de suelo se descarguen y saturen y aparezca mucha superficie con encharcamiento y aumente los riesgos.
Con respecto al maíz de primera, continuaron siendo óptimas a ideales las condiciones ambientales para los cultivares. Las nuevas precipitaciones, temperaturas medias a altas, disponibilidad de agua útil en los suelos, permitieron el desarrollo de los “estados reproductivos” sin inconvenientes, atravesando el denominado “período crítico” normalmente, como hace varias campañas no sucedía.
Un 97 % del cultivo se encontró en estado bueno a muy bueno, con lotes excelentes, un 2,5 % en estado regular y un 0,5 % en estado malo, como consecuencia de los excesos hídricos que provocaron muerte de plantas en áreas de encharcamiento – anegamientos. La sanidad detectada fue buena, sin manifestaciones de ataques de enfermedades ni de plagas.