La sequía y las heladas no son una buena combinación para el trigo. En el período de siembra se buscó la humedad en la cama de siembra (superficie) y el largo tiempo sin precipitaciones lo obligó al trigo nacido a buscar agua en las napas. Las zonas que tenían el recurso agua en las napas hoy se defienden mejor frente a la sequía, comparados con los lotes que no las tenían, aunque si tenían humedad en superficie para germinar.
Hoy los trigos en la zona central de la provincia de Santa Fe se mantienen con buen desarrollo en el 80% de los lotes, es que a fines de mayo y comienzo de junio se dieron dos lluvias, una por semana, de 25 a 40 milímetros. Esto hizo que aguanten bien hasta la fecha, no así en el norte del departamento Nueve de Julio, General Obligado y en el sur del departamento San Martín, límite oeste con los departamentos del este Cordobés.
Este microclima en la región central de Santa Fe, como en el Sudeste Bonaerense, hizo que a comienzos de la siembra el perfil del suelo se encontrara bien y la napa no estaba deprimida. Estos factores hicieron que la cosecha de maíz tardío se prolongará, así que se dieron un conjunto de condiciones que no fue homogéneo en toda el área de siembra.
Para Domingo Capeloni presidente de Aaprotrigo, si las precipitaciones se recuperan en los próximos días el trigo puede dar una sorpresa. Hay lotes que todavía no se desarrollaron y pese a que sufrieron bajas temperaturas y heladas pueden recuperarse rápidamente con algunos chaparrones, mientras hoy tratan de subsistir en algunas regiones apoyadas con las napas.
Por otro lado, aseguran que en la mayoría del área triguera ya hay daños irreversibles, es que hay distritos que no reciben lluvias desde fines de marzo. En esta campaña se sembraron 500.000 hectáreas menos por la falta de humedad, a lo que se le debe sumar el deterioro por la sequía.
Hay estimaciones que indican una merma del rendimiento de hasta el 15% promedio a nivel nacional. Esto significaría cerca de 4 millones de toneladas de trigo menos en la próxima cosecha. Con estos datos,el ingeniero Néstor Roulet ex dirigente de CRA, calculó que el complejo triguero dejará de aportar 700 millones de dólares, por el impacto de la sequía reinante en este momento.
